Con la TNDR · Técnica Naturista Desbloqueante y Regeneradora · podrás aliviar y calmar el dolor y recuperar tu cuerpo y tu vida.
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Seguro que te cuesta creer que ésto puede cambiar, aunque lo deseas con todas tus fuerzas…
En ocasiones, la mala gestión de una emoción, puede llevar a su reflejo en el cuerpo físico provocando diferentes lesiones en él. Cuando te dicen cállate, no llores, no te muevas, no hagas ésto o lo otro… coartan tu libertad y tu expresión y eso poco a poco va propiciando que crees corazas, bloqueos, emociones que se van quedando enquistadas.
Eso ocasiona problemas a la hora de amar, de caminar por la vida (se nos bloquean las piernas), te desanimas al escuchar «tú no vales», «no sirves para eso», «tú no puedes», y poco a poco pierdes la confianza en tí.
A veces son las creencias limitadoras, los miedos anticipados, la incertidumbre o la impotencia ante una determinada circunstancia, los cuales, acaban limitándote también físicamente. Así puedes desarrollar cistitis, piedras o cálculos, artrosis,… Liberándote de la emoción puedes sanar o mejorar el problema reflejado en el físico.
Antes de nada, quiero que sepas desde el principio que este va a ser un espacio de total libertad y de expresión para tí, que te voy a tratar con cercanía y respeto. No estoy aquí para enjuiciarte… así que, relájate, confía, fluye… Estoy aquí para acompañarte en tu recuperación, para que lo antes posible te sientas liberada de tus dolores, de tus bloqueos, de tu malestar. Mi deseo, al igual que el tuyo, es que salgas llena de energía, radiante, calmada y feliz.
Para ello, voy a seguir tu ritmo, el que tu cuerpo y tú me vais a marcar en todo momento. Ya no estás sól@.
Al inicio si te apetece podemos comentar brevemente, pero, si no es así, no pasa nada… Tu cuerpo habla por ti, y tus bloqueos se irán mostrando a través de tu cuerpo.
Comenzaré con una detenida y lenta exploración, para averiguar el porqué de tu dolor, molestia o bloqueo, para posteriormente proceder con un masaje profundo, minucioso y vibrante en la parte afectada.
En todo momento eres tú quien decide la intensidad de la fricción y del masaje. La comunicación entre nosotr@s va a ser fluida durante toda la sesión.
El masaje va deshaciendo los bloqueos, los nudos, las corazas, las protecciones… que ya no necesitas. Con el movimiento y la fricción, tus articulaciones, músculos, tendones, nervios, etc., se despiertan y eso provoca que el cuerpo reaccione, se regenere y restablezca a su óptimo estado, recuperando su funcionalidad.
Al contrario de otros masajes donde prevalece una cierta cantidad de aceites esenciales que el masajista extiende sobre amplias zonas del cuerpo; en el masaje TNDR, se masajea sobre la contractura o zona a tratar, deshaciendo el nudo doloroso, que generalmente está conectado con otro nudo doloroso que se halla normalmente en el vientre. Teniendo en cuenta que es a través del estómago, por donde «tragamos» alimentos o situaciones, que realmente no digerimos, no es de extrañar el origen emocional de muchas lesiones.
Soy Mireia paciente de Mónica. En dos sesiones de masaje se me ha arreglado el dedo gatillo (se me quedaba enganchado y sin movilidad). Es fantástica. Ahora me esta tratando mis bloqueos sexuales. Es algo que hasta ahora no me he querido tratar y si me he animado a ello es por su trato personal. Me aporta confianza, dulzura, cariño y mucha profesionalidad en sus manos. Me siento tranquila, cuidada y confiada. Gracias Mónica.
Me dolían tanto las muñecas que ya no podía hacer bien un trabajo muy importante para mi. Mónica al principio imitió los movimientos que me dolían y luego me iba masajeando todas las zonas implicadas en el movimiento, y eso con muchísimo cariño y un trato muy personal, para no decir fuera de serie. Unos 2 dias despues dejaron de doler mis brazos. Ahora he podido acabar el trabajo y si tengo éxito con el se realizará un gran sueño mio.
Mónica es una persona con una sensibilidad especial, que en cada masaje sabe leer tus dolencias, debilidades y emociones, dándole forma con sus manos a una sanación que va más allá de lo físico. Al final entras en una relajación que parece que te transporta a otro plano de la realidad.
Mi experiencia con Mónica es imposible de explicar. Entras pensando en un masaje pero lo que te encuentras es muchísimo más que eso. La experiencia es irrelatable, hay que vivirla. Crees que estás sanando el cuerpo y más que eso, sanas tu alma. Mónica es mucho más que una masajista, ella es mágica. Su calidez y su calidad humana junto a su habilidad, hace que vivas una experiencia magnífica.
¡Hola! Me llamo Domingo y he sido un deportista de élite. Siempre he estado acostumbrado a que los masajes me los hicieran profesionales dentro del mundo del boxeo. Y un día, dije voy a hacerme un masaje, y ya con 50 años encima, pues lo necesitaba. Y la verdad es que no tengo sino ganas de volver a repetir esa sesión de más de una hora, que tuvo conmigo en el cual me sentí después de terminada, pues una persona nueva. Si yo llego a saber que mis más de 15 años dedicado al deporte de contacto, hubiera habido una persona que me hubiera dejado tan relajado, tan bien, y tan bien colocado cada centímetro de mi interior a través de sus manos, no hubiera dudado que era y sería Mónica. Así que Mónica solo puedo decir de ti que eres una profesional, que eres increíble, que me encantó. Que además eres una persona amena, abierta con un corazón increíble que sabes escuchar. Gracias por todo. Ten por seguro que desde Tenerife regresaré a Barcelona, cada vez que pueda, para que sigas siendo tú quien me haga los masajes que no me ha hecho nadie jamás en la vida. Gracias mi niña.
Hola, actualmente tengo 43 años y Mónica ha sido capaz de recuperar toda mi energía que parecía que ya se estaba agotando. Después de estar unos 20 años trabajando en la empresa familiar de construcción, sentía que tenía un cuerpo desgastado y maltratado por todas partes debido al desgaste físico durante estos años, y sentía que mi cuerpo tenía 10 años más que yo!!!!. Empecé a buscar información para recuperar esa energía y elasticidad en la musculatura que no tenía a través de masajes y en esa búsqueda conocí a Mónica, y de eso ya hace unos dos/tres años. Os aseguro que mi vida ha cambiado un 200%, mi cuerpo, y yo con él, tengo un montón de ganas de realizar actividades y siento que me queda cuerda para mucho tiempo. En la actualidad me sigue tratando, y os aseguro que cuando acabo el tratamiento al principio estoy en un estado de relajación brutal, pero según se va despertando mi cuerpo, las sensaciones son de bienestar total. Y estar con Mónica es……, genial, la sensación durante el tratamiento es de aislamiento total y mi mente se olvida del mundo exterior. El trato es muy dulce y muy profesional, sabe encontrar los “dolores” que tenemos todos, y sólo escucha lo que hay que oir, el resto se ha de quedar en la calle. MUCHAS GRACIAS MÓNICA!!!!!!!!!!! Peke.
Acudí a ella por una antigua lesión de hombro en una caída de moto, que no había logrado recuperar después de varias visitas a especialistas. Ya me estaba afectando a otras partes del cuerpo. En pocas sesiones recuperé gran parte de la agilidad y movimiento perdido. Derroche de técnica en sus manos y dulzura en su voz, te transmite paz, que hace que te sepa a poco. ¡¡Gracias Mónica!!
Desde hace tiempo y a causa del trabajo, sobre todo, tengo contracturas diversas, espalda, cervicales, lumbares... Con los masajes de Mónica he experimentado una mejoría importante, notando que los nudos y bloqueos desaparecian. La atmósfera de tranquilidad y confianza que el trato personal y la profesionalidad de Mónica, invitan a iniciar un proceso de recuperación, no solamente del cuerpo sinó también emocional. Gracias Mónica.
Cuando Monica me hacía el masaje yo experimentaba liberación. Partes de mi que nunca habían sido masajeadas asi, se desanudaban. Durante unos dias, despues del masaje, experimente un estado de consciencia muy expandido. Con ganas de repetir y hacer un proceso para "recuperar" todo mi cuerpo.
La experiencia que tuve en las rodillas, fue que de una sensación de estar todo apelmazado, se fue como separando y eso me dio una cierta movilidad más. Entonces, esa fue la mayor bondad que yo noté, de tenerlo todo como hecho un amasijo, el ir separando las fibras, permitió que circulara mejor la energía y tener mayor movilidad.
¿Sabías que también lo puedes utilizar de manera preventiva? Evita la aparición de dolor, lesiones y bloqueos físicos y emocionales.